Escuela de Salta: Donde aprender a respirar se volvió una lección de urgencia

Las escuelas Joaquín Castellanos y Sarmiento se enfrentan a un alarmante patrón de intoxicaciones entre sus estudiantes, siendo el último incidente en la primera de ellas un claro ejemplo de los riesgos que enfrentan los menores en estas instituciones. Ambas escuelas han reportado casos de intoxicación relacionados con fugas de gas y otras aún desconocidas, lo que levanta preocupaciones sobre la seguridad y la infraestructura de los espacios educativos, poniendo en evidencia la necesidad urgente de medidas preventivas y una revisión exhaustiva de las condiciones en las que estudian los alumnos.

En un preocupante incidente ocurrido este jueves por la tarde, la Escuela Joaquín Castellanos, ubicada en 20 de Febrero 131, fue evacuada tras detectar una posible fuga de gas. Personal del SAMEC (Servicio de Asistencia Médica de Emergencia de la Ciudad) atendió a más de 40 menores que presentaron síntomas de intoxicación, realizando la intervención médica necesaria para su estabilización.

Según informaron fuentes oficiales, los estudiantes presentaban síntomas como falta de aire, irritación de las vías respiratorias y estados de nerviosismo. A los menores se les administró oxígeno, y varios de ellos fueron trasladados al Hospital Materno Infantil y al Hospital San Bernardo, en función de la diferencia de edad. En total, 26 pacientes fueron atendidos en las instalaciones de la escuela, mientras que 22 fueron derivados a centros médicos.

El Director General de Seguridad, Comisario Luis Daniel Ríos, explicó que la situación se complicó debido a la lluvia, lo que generó mayor ansiedad entre los niños. «En primera instancia había sido derivado un solo menor, pero a medida que el tiempo avanzaba, más chicos comenzaron a descompensarse», detalló Ríos.

Al lugar también acudieron efectivos de Bomberos y personal de la empresa distribuidora de gas, quienes trabajaron conjuntamente con los peritos de criminalística para investigar el posible origen de la fuga en el área de la cocina de la institución. «El gas ha sido cortado y las clases no se reanudarán mañana, ya que se realizarán trabajos de seguridad más tranquilos», añadió el Comisario.

A pesar de la gravedad de la situación, los profesionales de la salud informaron que, aunque los menores presentaban síntomas respiratorios, todos estaban dinámicamente estables y ninguno había perdido el conocimiento. La rápida respuesta tanto de los servicios de emergencia como de los enfermeros de centros de salud cercanos fue fundamental para el control del incidente. «Gracias a Dios, la situación está prácticamente controlada», concluyó un vocero del SAMEC.